El huracán Milton azotó el estado de Florida el pasado día miércoles en horas de la noche, siendo este descrito como un fenómeno de categoría 3, con vientos que alcanzaron velocidades de hasta 200 km/h. Las marejadas ciclónicas ocasionaron graves daños y obligaron a la evacuación de numerosos residentes en diversas áreas afectadas a raíz de la misma situación climática.
Antes de la llegada del ciclón, los habitantes quedaron sorprendidos al observar un cielo teñido de un llamativo color morado. Aunque inusual, este fenómeno sí tiene una explicación científica relacionada con la dispersión de Rayleigh, la cual se produce cuando la luz solar interactúa con las partículas y gases en la atmósfera.
La cercanía del fenómeno, es decir, del huracán Milton, intensificó este efecto, haciendo que la luz se dispersara de tal forma que el cielo adoptara esa tonalidad particular que llamó la atención de todos.
Este tipo de cambio atmosférico no es un presagio de eventos futuros, sino una consecuencia natural de cómo la luz interactúa bajo ciertas condiciones meteorológicas. Tras el paso del huracán, la infraestructura en diversas regiones de Florida sufr1ó graves daños, mientras las autoridades locales continúan evaluando la situación y emitiendo recomendaciones para garantizar la seguridad de la población.
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